Masaje con piedras calientes
Este tipo de técnica de relajación no es una invención moderna como se cree, la terapia de piedra se originó en el antiguo Oriente, hay unos 5000 años. Y fue utilizado en los baños de la antigua Roma, ya que estaban en las piedras de mármol frío después de un baño caliente, y las piedras calientes nativo americano se colocan en el útero para aliviar los calambres menstruales.
¿Qué es el masaje con piedras calientes?
Para la terapia variada la temperatura variada es caliente o las piedras frías se utilizan.
Son suaves y las piedras lisas se utilizan principalmente las rocas basálticas son rocas volcánicas que, entre la oscuridad son más densas y contienen más hierro, lo que ayuda a retener el calor por más tiempo. Con piedras frías que se utilizan principalmente piedras de mármol.
En la terapia de piedra se utilizan más de 60 rocas diferentes y la temperatura no puede superar los 50 grados. Puede combinar el uso de piedras calientes y frías.
Se dice que el calor por la potencia magnética que transmite las rocas en combinación con el masaje, proporciona energía, oxigena la piel, revitaliza y relaja.
El masaje es poner las piedras en diferentes áreas específicas del cuerpo que son puntos de energía, como la columna vertebral, el abdomen, la frente, las manos y los dedos de los pies, causando la sangre y los vasos linfáticos para dilatar y por lo tanto, estimulará la circulación.
Al asegurar que estos efectos son eliminar la tensión, el cuerpo se relajará, y la piel se oxigenará. Luego se aplica aceite y se realiza un masaje de relajación terapéutica.
Los beneficios del masaje con piedras calientes
Algunas de las ventajas de esta técnica son:
Elimina las toxinas
Estimula el metabolismo
Alivia los calambres menstruales
Alivia dolores de espalda
Reduce el estrés
Proporciona relajación
Induce sueño
Cons-indicaciones
Este tratamiento no debe llevarse a cabo:
Mujeres embarazadas
niños
Anorexicos
Las personas con varices, heridas abiertas, arritmias, hipertensión,
Trastornos hepáticos o renales
Epilepsia, problemas cardíacos, diabetes, osteoporosis, migraña,
Fatiga muscular crónica